Enfrentar una acusación criminal puede ser una experiencia desestabilizadora, y es importante actuar con prudencia y eficacia para proteger sus derechos. Ya sea por una acusación por conducir en estado de embriaguez o bajo la influencia de drogas, lesiones o cualquier otro delito penal, cada situación requiere una defensa personalizada, adaptada a las particularidades del caso y las pruebas involucradas.
Los riesgos pueden ser considerables, por lo que nuestro gabinete está aquí para acompañarlo a lo largo de este proceso complejo. Le proporcionaremos asesoramiento jurídico y lo representaremos con eficacia ante los tribunales, con el fin de proteger sus derechos y ofrecerle la mejor defensa posible.
Los servicios ofrecidos son los siguientes:
Conducir bajo los efectos del alcohol o substancias prohibidas
Se trata de manejar un
vehículo mientras el conductor está bajo los efectos del alcohol, drogas u otras sustancias que alteran sus capacidades de conducir. También es considerado un delito, incluso si el motor del
vehículo no estaba encendido o en movimiento.
Lesiones simples
Este delito consiste en infligir una lesión o ejercer una fuerza
física no consentida sobre otra persona, sin la intención de causar lesiones graves. Esto incluye agresiones menores, como golpes o empujones.
Daños
El daño se refiere a la destrucción o deterioro intencional de bienes ajenos, o
a acciones que perjudican la propiedad de otra persona, como vandalizar un vehículo o una vivienda.
Robo
El robo implica la toma de bienes ajenos sin consentimiento, con la intención de
conservarlos. Esto incluye los robos en viviendas, el hurto en tiendas y otros tipos de depredaciones.
Delitos relacionados con la violencia doméstica
Las infracciones
cometidas en casos de violencia doméstica se tratan de forma especial y son diferentes a delitos similares que ocurren entre personas que no tienen una relación cercana:
Defenderse no es huir de la verdad, es darle la fuerza para hacerse escuchar.